Frenética, intensa y con un apartado visual de gran nivel, la película es una
nueva propuesta más que correcta dentro del género.
El mundo se paraliza cuando un grupo de viajeros en el tiempo se
transporta desde el año 2051 para entregar un mensaje urgente: la humanidad está perdiendo la guerra mundial contra una especie alienígena
letal. La única esperanza de supervivencia es que los soldados y los ciudadanos del
presente sean transportados al futuro y se unan a la lucha. Entre
los reclutados está el profesor de instituto y padre de familia Dan Forester (Chris Pratt) quien, decidido a salvar el mundo por su hija, se une a
una brillante científica (Yvonne Strahovski) y a su padre (J.K. Simmons) en una búsqueda desesperada por reescribir el destino del planeta
En unas horas llega a Prime Video una nueva película de ciencia
ficción cuyo estreno en salas se ha visto afectado por la pandemia.
Dirigida por Chris McKay (Batman: La LEGO película) y escrita por
Zach Dean (24 horas para vivir), la cinta nos propone
otra invasión a gran escala perpetrada por una raza de extraterrestres
monstruosos y letales que tiene lugar dentro de unas décadas. Además,
McKay y Dean juegan con todos los elementos conocidos sobre los viajes en el
tiempo de una forma algo más lineal, despreocupándose de las posibles
consecuencias desastrosas que puedan derivar de ciertos actos. Sí, todo esto
hace que las comparaciones con filmes como ‘Al filo del mañana’ sean
inevitables, pero el filme, sin ser ciencia ficción dura,
toma su propio camino y hace que nos preguntemos lo siguiente: ¿qué
pasaría si supiéramos que el mundo se va a acabar en menos de 30 años?
¿Las luchas del mañana siguen siendo las nuestras? Claro que sí. Y si en
vez de alienígenas hablamos de, por ejemplo, el cambio climático, pues
la duda ofende.
Chris Pratt (Vengadores: Endgame) protagoniza la película y
vuelve a demostrar que no es precisamente un actor virtuoso, incluso se
encuentra menos carismático y más rígido de lo habitual, pero consigue
que su Dan Forester recuerde un poco a héroes como el de
Casper Van Dien en ‘Starship Troopers’, por citar uno de tantos
parecidos que podemos encontrar en el género. Por otro lado, Yvonne Strahovski
(El cuento de la criada) está impecable como la guerrera científica Romeo y comparte una
agradable química con Pratt. También tenemos a Sam Richardson (Superintelligence) interpretando al alivio cómico de turno, aunque es verdad que su
personaje no se queda estancado en esta faceta. Además, para redondear el
reparto, J.K. Simmons (La Liga de la Justicia de Zack Snyder) aparece durante el primer y tercer acto del filme y pone de manifiesto que
sigue en plena forma, pues a su edad es capaz de interpretar cualquier papel. Por último, Betty Gilpin (La caza) aparece como la mujer del protagonista y aquí está bastante desaprovechada a
estas alturas de su carrera.
Durante sus 140 minutos, ‘La guerra del mañana’ es un
entretenimiento frenético que destaca sobre todo por
sus intensas secuencias de acción, sus impactantes imágenes y unos
efectos especiales de gran nivel. Sin embargo, como viene siendo habitual en este tipo de filmes de enorme
presupuesto, el guion es el aspecto más ordinario de la cinta, pues está
lleno de diálogos un tanto perezosos, algún que otro cliché y Dean no arriesga
en nada en especial. Al menos, sí que logra aportar algo de corazón construyendo
algunas relaciones entrañables entre los protagonistas. Además,
cuenta con
tantas referencias de tantas películas de ciencia ficción que sería
imposible nombrarlas todas aquí. Aún así,
todo forma un conjunto que funciona con personalidad propia aunque su
estructura no deje de basarse en la fórmula hollywoodiense de siempre.
Sin duda, esta es una nueva propuesta más que correcta dentro del género, pero
es una auténtica desgracia -o vergüenza- no poder disfrutar de esta película en
una sala de cine.
¿Ha comenzado definitivamente la era del gran blockbuster televisivo?
Puntuación: 6,5/10
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