Sinopsis
En la tercera temporada de ‘See’, ha pasado casi un año desde que Baba Voss derrotó a su hermano némesis Edo y se despidió de su familia para vivir en el bosque. Pero cuando un científico trivantiano desarrolla una nueva y devastadora forma de armamento vidente que amenaza el futuro de la humanidad, Baba regresa a Paya para proteger a su tribu una vez más.
Crítica de la tercera temporada de See
Hoy empieza en Apple TV+ el apresurado último viaje a través de la tierra de los ciegos, un mundo que esconde un sinfín de elementos y matices que probablemente ya nunca conoceremos. Si hacemos un repaso a las dos temporadas anteriores, la falta de profundidad a la hora de explorar este universo era un fallo de guion casi insultante. Por desgracia, aunque de cierta forma puede resultar una bendición, en esta temporada volvemos a tropezarnos con la misma piedra, pero a cambio nos llevamos unas ingentes dosis de acción y violencia que hacen de los últimos episodios todo un entretenimiento.

Y es que, Steven Knight (Peaky Blinders) y compañía, por fin se han dado cuenta de que no saben hacer de este mundo un lugar realmente apasionante. Por ello, más allá de alguna novedosa piedrita en el camino, en esta última temporada han renunciado a todo desarrollo del mismo y han decidido centrarse en el desenlace de sus protagonistas. Además, la serie abraza sin complejos su evidente alma de blockbuster, esparciendo acción y epicidad en cada episodio acompañados de un destacado apartado audiovisual.
Sin duda es una lástima que, pese a haberlo intentado con más pena que gloria, no se haya podido dar a este mundo el tratamiento que merece. No obstante, sí que existe algo muy interesante en la premisa de esta última entrega. Hay un claro paralelismo con nuestra propia historia -la violenta-, pues las mayores villanas de esta temporada son las malditas bombas, nada más y nada menos. Al final, ciegos o no, la humanidad está condenada a evolucionar de la misma forma. Es aquí donde la serie, para rellenar el hueco que deja la falta de desarrollo de su universo, comienza a lanzar al aire mensajes políticos y cuestiones sobre nuestra existencia.

De esta forma, entre las sangrientas batallas de Baba Voss, las rencillas políticas de Maghra y Halan, la crisis de identidad de Haniwa y Kofun y el perturbador viaje de una espectacular Sylvia Hoeks como Sibeth, la serie lanza claros mensajes antiarmas, así como lecciones sobre si a veces es necesario eliminar la historia para avanzar o el lastre que supone juzgar con la mirada en vez de con la razón. La verdad es que es interesante, sorprendente incluso, pero la realidad es que esto no maquilla el hecho de que el guion se sienta demasiado apresurado y algunas decisiones se antojen tardías.
Sin embargo, la mayor cualidad de la tercera temporada de ‘See’ son sus grandes dosis de acción, su ritmo y unos personajes que han conseguido imponerse al atractivo de la propia premisa. Es cierto que Knight y compañía no han tomado ningún riesgo y la escala de este desenlace resulta más pequeña de lo que podría dar su mundo, además de ser predecible hasta decir basta. Pero, aunque no ha sido un ni mucho menos redondo, en general este es un entretenimiento más que correcto que ha sabido terminar a tiempo. De todas maneras, a lo mejor este universo no ha dicho su última palabra. No me importaría volver si llega el momento.
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