STARZPLAY estrena este jueves 23 de junio la serie ‘El Refugio’, una nueva propuesta latinoamericana de ciencia ficción, drama y misterio.
En la serie, una familia vive las horas más insólitas de su vida cuando comienzan a producirse fenómenos extraordinarios provocados por una fuerza de la naturaleza totalmente desconocida. Eso sí, todo ocurre a través de sus pantallas.
Cuando salen al exterior, no parece ocurrir nada, aparte de lo que la primavera en el campo mexicano depara a un grupo de humanos. Los padres deben proteger a sus hijos de un enemigo invisible que ni siquiera ellos saben si existe de verdad. ¿Qué es lo real? ¿Qué ha pasado con el mundo que conocían? ¿Es este rancho un refugio? ¿Es el último reducto de la humanidad?
La serie de 6 episodios está dirigida por Pablo Fendrick (Entre hombres) y escrita por Julio Rojas (La vida de los peces), Francisco Ortega (Logia) y Enrique Videla (La Jauria). Protagonizan Alberto Guerra, Ana Claudia Talancón, Zuria Vega, Alfredo Castro, Diego Escalona, Camila Valero, Isabella Arroyo, Jorge Guerrero, Gabriela Cartol, Fernanda Urrejola, Paloma Woolrich, Consuelo Carreño, Cayetano Arámburo y Gustavo Sánchez Parra.
Impresiones de los tres primeros episodios de El Refugio
Con solo tres episodios vistos resulta muy complicado hablar de una serie, en especial si no sabes hacia dónde quiere ir el guion, cómo va a desarrollar sus conflictos y si el desenlace que nos plantea está a la altura de su ambición.
Y en una ficción que se apoya tanto en su misterio como ‘El refugio’, conocer toda esta información es fundamental para saber si estamos ante una producción capaz de justificar su existencia, sobre todo más allá de la novedad que supone el hecho de producir una propuesta de este tipo en Latinoamérica.
Sin embargo, si hay que emitir un veredicto con lo observado hasta ahora, tan solo he sido testigo de una serie que intenta copiar muchos de los códigos que ya hemos visto mil veces antes en otras producciones de ciencia ficción parecidas.
Es una propuesta que parece querer actualizar ‘Señales’ a la era de los smartphones e Internet, mezclándola con esa sensación de aislamiento e incertidumbre propia de ‘Calle Cloverfield 10’ y una colección de dinámicas familiares que entran en ebullición bajo una atmósfera que recuerda a la más reciente ‘Silent Night’. Eso sí, salvando las enormes distancias que, pese al esfuerzo, separan a estas con la ficción que nos atañe.
En su favor, la serie acierta a la hora de aprovechar los matices propios del tiempo en la que transcurre. Tras una pandemia de la que aquí se pueden apreciar muchos paralelismos, esta es una historia que nos toca muy de cerca gracias -o por culpa- de su retrato de la influencia que las redes sociales y las ‘fake news’ tienen en nuestras vidas.
Una potencial distorsión de la realidad que provoca confusión, miedo y paranoia, sentimientos con los que los personajes deben lidiar escena tras escena. Una pena que ninguno de ellos sea especialmente agradable. Son algo arquetípicos y planos y, aun así, el guion y las interpretaciones consiguen que en ocasiones algunos lleguen a ser muy poco creíbles.
La serie también mezcla todo su misterio y su ciencia ficción con manidos dramas de relaciones rotas, crisis de identidad y fantasmas del pasado por los que se pasa un poco de puntillas. Pese a ello, la ficción tiene muy buenas intenciones, pero el resultado final podría ser en general más pulido. Además, ojalá el guion fuera más sutil a la hora de hacernos dudar si lo que ocurre es real o no.
Creo que, aunque intenta no dar pasos muy grandes, muestra muchas de sus cartas demasiado rápido y hay poca lugar para la sorpresa. Habrá que ver si consigue explotar su potencial y, al menos, dar una inquietante lección sobre lo que somos capaces de hacer cuando nos enfrentamos a una situación así.
Ver ahora
Recuerda que puedes seguirnos en Facebook, Twitter o Instagram.